Artritis psoriasica

Artritis psoriasica

La Artritis Psoriásica es una enfermedad inflamatoria crónica que combina síntomas de la psoriasis, una afección cutánea, con inflamación articular. Pertenece al grupo de las espondiloartropatías y puede afectar tanto las articulaciones como la piel, causando dolor, rigidez y daño progresivo si no se trata adecuadamente.
Causas y factores de riesgo
No está completamente definida, pero se asocia con una combinación de factores:
- Genéticos
- Inmunológicos
- Ambientales
La predisposición genética juega un papel importante, y en muchos casos, la enfermedad se desencadena por infecciones, traumatismos o estrés en personas con psoriasis.
Síntomas más comunes
- Dolor e inflamación en articulaciones.
- Rigidez matutina.
- Fatiga.
- Lesiones cutáneas: Placas escamosas y enrojecidas.
- Hinchazón en dedos: Dactilitis.
- Dolor en talón o planta del pie: Entesitis.
- Posible afectación de la columna vertebral.
Diagnóstico
El diagnóstico se basa en:
Evaluación clínica:
- Evaluación clínica: Que incluye historia médica, examen físico y pruebas complementarias.
- Estudios de laboratorio: Marcadores inflamatorios.
- Técnicas de imagen: Radiografías o resonancias magnéticas.
Manejo Farmacológico
El tratamiento de la Artritis Psoriásica se enfoca en controlar la inflamación, aliviar los síntomas y prevenir el daño articular.
- Fármacos: Que modulan la respuesta inmunológica.
- Tratamientos: Para reducir la inflamación y prevenir daño articular.
- Enfoque terapéutico personalizado: Según severidad y manifestaciones clínicas.
El manejo adecuado mejora la calidad de vida y reduce el impacto en las actividades diarias.
